Soy Monaguillo
Servidores del altar no por nuestros méritos sino por su bondad.

Bienvenidos, Servidores del Altar
Han sido llamados a un servicio de inmenso honor y regalo de Dios: asistir de cerca en la Sagrada Liturgia, el corazón de la vida de la Iglesia, donde el Cielo y la tierra se encuentran. Ser monaguillo no consiste simplemente en realizar tareas o mover objetos; es un ministerio. Es participar activamente en los Sagrados Misterios y ayudar a toda la comunidad parroquial a orar.
Este sitio ha sido creado para su formación. Como responsable de la dignidad y el orden de las celebraciones, mi propósito es guiarles para que comprendan la Liturgia de forma clara y sencilla. Aquí no solo aprenderán qué deben hacer (cómo usar el incensario, presentar las ofrendas o portar los cirios), sino, más importante aún, por qué lo hacen. Explicaremos el significado profundo de cada rito, cada gesto y cada palabra.
Un monaguillo bien formado no solo actúa con precisión y decoro, sino que sirve con reverencia, piedad y alegría, comprendiendo que está en la presencia de Dios. Su servicio bien hecho es una oración visible que ayuda a todos a celebrar mejor.
Prepárense con diligencia para servir a Cristo en su Altar.